se te desborda el corazón.
Y la sangre fluye por todas las calles
que nunca me llevarán hacia ti.
Expongo mis heridas como derrota
y asumo la derrota como naufragio.
Sin salida pone en la utopía de tu recuerdo,
si supiesen que eras mi salida de emergencia
tantas noches en vela.
¿Y la salida de emergencia ahora que ya no estás?
Estoy
abandonada
a
la
intemperie.
Y nadie consigue salvarme
de este infierno gris
que es no verte
cada día despertar.